Tras un desastroso comienzo, sumando apenas 4 puntos en las primeras 7 jornadas del campeonato, el club albaceteño anunciaba la destitución de José Manuel Aira como técnico del primer equipo; en su lugar llegaría Enrique Martín Monreal hasta final de temporada. El equipo experimentaba un cambio radical y comenzaba a sumar puntos de manera continua hasta colocarse a pocos puntos de la zona de ascenso a LaLiga Santander.